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Hola de nuevo mis queridos hermanos y hermanas,

Mensaje Semanal - Estas Preparado?

Por lo general, en esta época del año, cuando hablamos de "preparación", nuestras mentes evocan rápidamente imágenes y pensamientos de enlatar duraznos, congelar maíz o aprender técnicas de primeros auxilios. Pero hoy me gustaría hablar de un tipo diferente de "preparación".

Sino santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para dar respuesta a todo aquel que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros... (1 Pedro 3:15)

En nuestra última reunión del Consejo de Estaca, Dave Thompson, El presidente de los Hombres Jóvenes de estaca, compartió este pasaje de las Escrituras junto con algunas experiencias personales de cómo el estar siempre preparados para compartir la razón de nuestra esperanza en Cristo ha marcado una diferencia en su vida.

Desde entonces he pensado en una variedad de formas en que podemos aplicar este gran consejo.

La primera forma que me vino a la mente fue la oportunidad que tenemos cada semana de compartir experiencias en nuestros servicios de adoración y clases. Cuando estamos dispuestos a compartir los eventos de aprendizaje significativos de nuestras vidas, no solo refrescamos nuestros propios testimonios, sino que bendecimos la vida de los demás en formas que tal vez nunca conozcamos. Esto también puede suceder cuando compartimos nuestras experiencias y sentimientos positivos a través de las redes sociales.

Otra forma en que creo que estamos haciendo esto es a través de los esfuerzos del Comité de Conexiones Comunitarias. La mayoría de nosotros estamos familiarizados con los grandes eventos de CCC, como las colectas de alimentos, el intercambio de artículos para el hogar o la feria Share the Harvest, que se realizarán en unas pocas semanas. Estos grandes eventos crean oportunidades para servir a nuestros vecinos Y trabajar junto a ellos haciendo algo bueno por los demás. Esto construye lazos de buena voluntad y amistad para toda la vida.

Pero es posible que no esté tan familiarizado con los otros esfuerzos del CCC para proporcionar ropa, camas, muebles, bicicletas o alimentos a quienes los necesitan... sin costo alguno. La hermana Jasper rutinariamente me actualiza sobre las personas que han donado y las personas que están recibiendo. Por lo general, no los publicito por respeto a la privacidad, pero es asombroso y conmovedor ver la magnitud y la profundidad de su generosidad. En mi opinión, estas son algunas de las expresiones más puras de la esperanza que sentimos en Cristo. Si tiene artículos para donar o le gustaría ser parte de algo tan genuino y amable, comuníquese con la Hermana Jasper.

La forma final que mencionaré es ser lo que yo llamo... una persona de "sonreír primero".

En mayo pasado, en nuestra conferencia de estaca, el élder Bowen nos aconsejó que abriéramos la boca y compartiéramos el evangelio. Una de las formas en que estoy aprendiendo a hacer esto, también fue sugerida por el hermano Thompson en sus comentarios al consejo de estaca. Es simplemente esto…

¡Sonríe más y sonríe primero!

Cuando le sonrío a la persona que está frente a mí en la gasolinera, en el supermercado o en un restaurante, casi siempre me devuelve la sonrisa. Y en ese momento de conexión, tengo la oportunidad de decir "hola" o "¿cómo estás hoy?" o ​​cualquier otra cosa para entablar una conversación. Desde que empecé a sonreír conscientemente más y a sonreír primero, he tenido más oportunidades que nunca de hablar con la gente. Y en esas conversaciones surgen oportunidades para hablar sobre quién soy y en lo que creo... no de una manera sermoneadora, sino de una manera normal y natural... porque lo que creo es parte de lo que soy.

Si espero a que la otra persona sonría o me salude, casi nunca sucede. Es demasiado fácil en estos días evitar las conversaciones cara a cara y concentrarnos en nuestros teléfonos.

Así que me he comprometido a ser una persona que “sonríe primero” y les invito a que consideren hacer lo mismo.

Espero que cada uno de nosotros se centre en este importante aspecto de nuestra “preparación” personal.

No nos cuesta nada compartir nuestro tiempo y sonreír más, pero estas acciones simples pueden traer tesoros... incluso tesoros escondidos... que aumentarán nuestro gozo en el evangelio de Jesucristo.

Se los prometo.

Les amo.

Presidente Gardner